Se cumplen 10 años al inicio del primer juego de cartas Argentino de TCG «Encrucijada Guerra de las Épocas».
Mi memoria es un laberinto del cual a veces ni yo mismo puedo salir.
Las fechas no son mi fuerte y por ello a veces hay que recurrir a las máquinas. Es así, como recuerdo de golpe, tal puñetazo de un coloso metalico en mi cabeza que me marea y explota cada rincon de mis neuronas; sopresivamente mi mente lo toma con un «¿hace tanto tiempo?» «¿hicimos eso?¿nosotros?»
Un día de noviembre, del año 2005, recluté por los medios más inesperados a un grupo de artistas para empezar un proyecto de juego de cartas, en un pueblito con cara de ciudad.
Con $1000(mil) en el bolsillo pero con el espíritu de millones. Muchos «artistas» pasaron por una reunión que nadie entendía «¿personajes para un juego de mesa?», entre los pocos que no se rieron o que no me insultaron por hacerles perder el tiempo, el aura de héroes atrajo a los verdaderos valientes, entre ellos Gastón Gonzalez, Carla Puchetta y Esteban Carsetti, bajo la tutela de un ave mística, una pequeña lechuza parada en el poste de luz que alumbraba la ventana desde afuera (real, nunca supimos cómo llegó, qué queria o si solo estaba allí para presagiar un destino divino) nos reímos un buen rato de aquellos que no entendieron lo que significaba inventar, crear y aventurarse con una idea de un juego de mesa.
Ilustración: Gastón Gonzalez
Entintado: Esteban Carsetti
Diseño: Emmanuel Rubio
Así fue, como «Héroes Creaciones» empezó. Pero no sabíamos cómo seguir, con los inicios del internet en el pueblo, llendo religiosamente 2 o 3 veces al ciber solo para contestar mails e investigar el mundo que no podía alcanzar físicamente, conocimos a Victor Fornes y Pedro Silva, los guías y maestros desde la red. Nos tomó un largo año producir las primeras 100 cartas, aprendiendo a usar las computadoras, aprendiendo a usar software, aprendiendo los trucos del diseño y el entintado digital, aprendiendo los costos de producción, los límites y potenciales de la realidad cuando se mezclaba con los sueños…
Para el 10 de Septiembre de 2006, con un año completo desde aquella loca reunión, «Encrucijada Guerra de las Épocas» estaba oficialmente terminado y listo para salir al aire. Primero localmente, jugando en el bar de Sanso, luego con algunos envíos de barajas esporádicos a travez de internet…
Con muchísimo empeño, una red de contactos crecía día a día y se creaba una comunidad que en los inicios del año 2008, el ahora Heroes Estudios, contaba ya con más de 40 artistas y creativos de al rededor del mundo, que entre todos nos ayudabamos, aportamos, inventamos… crecimos. Durante varios años más, la comunidad alimentaba las cartas del juego de forma bastante constante, aunque al final jugabamos más con la comu que con el juego en sí, muchos eventos, muchas charlas, muchas historias divertidas de las épocas en la que los foros eran el principal medio de comunicación social (y sigue siendo el mejor aunque no el más usado).
Alcanzamos la cima cuando pudimos exponer durante el Tinta Nakuy en Diciembre de 2010, gracias a Diego Balverdi que nos invitó, aunque nos mandó al frente como «la empresa internacional de juegos de mesa»…
Por suerte el Tinta, era un evento que apuntaba a la exposición de artistas e ilustradores, encajando perfectamente con lo que teníamos. Destacando los aportes y trabajos de Gonzalo Umlandt, Sombra Errante, las historias de Rodrigo Grenon, y muchos otros. Estuvimos mezclados entre los artistas tucumanos donde conocí a otro gran aditamento a las filas, el gran Rodolfo Paz; bajo el tunel de los principios de una convención de manga y animé en el mismo lugar, ayudado por mi hermano Sebastian Rubio, enseñamos a jugar y brillamos, fuimos invitados a muchos otros eventos, conocimos a muchas otras personas con mágia en las manos y un universo en sus cabezas. Para ese entonces ya no era solo un juego de cartas, teníamos los principios de un gran Comic, una revista, una web de 5 estrellas y millones de proyectos en camino.
No, no nos hicimos ricos, ni si quiera formamos una «empresa» con todos los títulos que eso supone.
Hicimos historia, compartimos aventuras, hoy somos nombres que algunos pocos murmuran o mencionan, unos pocos que son gigantes, son los pocos que realmente importan, porque saben, que hace 10 años, comenzó una leyenda, bajo las alas de una lechuza; Algo que rescato después de tantos años, es cómo muchos se acercan a saludarme como si fuera una celebridad, por las razón más inesperada: los inspiré a romper las cadenas que espantaban sus sueños. Es por este tipo de saludos que sigo haciendo lo que hago sin importarme ni un centavo. Tratando de estar donde se necesiten Héroes.
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